Hoy leí en un periódico de circulación nacional una nota, breve, demasiado breve para poder calificarla. Bacterias causan muerte a bebés, ese era el título infame y con la total desfachatez de la falta de profesionalismo tanto de los que desde la parte médica dieron la “conclusión” y desde la parte periodística, de quién no tuvo la pericia ni la perspicacia de tratar de averiguar que sucedió realmente.
Ambos el médico y el comunicador tienen una responsabilidad social enorme y cuando se falla de ambas partes siempre alguien sale perdiendo. En este caso fueron 5 familias dominicanas a las que desde el primer momento se les ocultó la razón del deceso de sus hijos recién nacidos. De todos es conocida la reticencia del dominicano a las necropsias, bien porque son caras o porque nunca se les enseñó que la verdad detrás del enorme telón de la medicina está justo ahí, en las manos de un patólogo serio, creíble e incorruptible. Fueron los padres, en un acto inédito y casi heroico los que exigieron una respuesta a estas muertes.
La respuesta es tan brutal que más que llamarme la atención por la manera de describir el origen de la sepsis, sentí vergüenza e indignación. Adquirieron alegadamente de las madres. Esa es la conclusión de las autoridades del mismo hospital donde ocurrieron los decesos y de su asesor técnico. En primer término ¿Qué es eso de asesor técnico en una entidad hospitalaria? Una botella más, un salario que se pierde en las turbias aguas de la burocracia. En segundo lugar la investigación es tan contradictoria que mejor era no publicarla.
Si las madres estaban sépticas (infectadas) donde están los médicos que les atendieron durante el embarazo, eso es lo primero que hay que averiguar para empezar a poner las responsabilidades donde deben estar. Busquemos la historia clínica de esos nueve meses de embarazo y ahí comenzaremos a ver como los servicios de salud que se prestan en nuestro país no están ni medianamente regulados. Es imperdonable que una mujer llegue séptica al parto en un país donde se habla de carretera informática y donde corren los carros que sería difícil poder ver en cualquier metrópoli. Busquen una mejor excusa.
Un parto extrainstitucional no es causa directa de muerte neonatal, ese es otro argumento de los que se armaron la institución, su asesor y la entidad reguladora de salud. Por favor, no jueguen con la inteligencia de los lectores ni con la sensibilidad de las familias. Al dar una información de esta envergadura piensen que siempre hay alguien que aunque sea por aburrimiento los puede leer.
Ambos el médico y el comunicador tienen una responsabilidad social enorme y cuando se falla de ambas partes siempre alguien sale perdiendo. En este caso fueron 5 familias dominicanas a las que desde el primer momento se les ocultó la razón del deceso de sus hijos recién nacidos. De todos es conocida la reticencia del dominicano a las necropsias, bien porque son caras o porque nunca se les enseñó que la verdad detrás del enorme telón de la medicina está justo ahí, en las manos de un patólogo serio, creíble e incorruptible. Fueron los padres, en un acto inédito y casi heroico los que exigieron una respuesta a estas muertes.
La respuesta es tan brutal que más que llamarme la atención por la manera de describir el origen de la sepsis, sentí vergüenza e indignación. Adquirieron alegadamente de las madres. Esa es la conclusión de las autoridades del mismo hospital donde ocurrieron los decesos y de su asesor técnico. En primer término ¿Qué es eso de asesor técnico en una entidad hospitalaria? Una botella más, un salario que se pierde en las turbias aguas de la burocracia. En segundo lugar la investigación es tan contradictoria que mejor era no publicarla.
Si las madres estaban sépticas (infectadas) donde están los médicos que les atendieron durante el embarazo, eso es lo primero que hay que averiguar para empezar a poner las responsabilidades donde deben estar. Busquemos la historia clínica de esos nueve meses de embarazo y ahí comenzaremos a ver como los servicios de salud que se prestan en nuestro país no están ni medianamente regulados. Es imperdonable que una mujer llegue séptica al parto en un país donde se habla de carretera informática y donde corren los carros que sería difícil poder ver en cualquier metrópoli. Busquen una mejor excusa.
Un parto extrainstitucional no es causa directa de muerte neonatal, ese es otro argumento de los que se armaron la institución, su asesor y la entidad reguladora de salud. Por favor, no jueguen con la inteligencia de los lectores ni con la sensibilidad de las familias. Al dar una información de esta envergadura piensen que siempre hay alguien que aunque sea por aburrimiento los puede leer.
1 comentario:
Es una lástima que este comentario,por no llamarlo artículo de opinión,no sea leído por más personas.También sentí pena del periodista cuando leí "adquirieron alegadamente de sus madres".No te percatas de lo común que es esta palabra en nuestros medios?
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