martes, 1 de julio de 2008

Un duro golpe al ego: La ortografía

No es uno, sino miles de dolores de cabeza los que causa la bendita Ortografía. Esta no es más que la aceptación de un grupo de normativas aceptadas por una comunidad lingüística. No es un proceso necesariamente técnico, pero si necesita de aplicación, porque va desde la correcta utilización de la grafía, hasta el buen uso de la tildación y la puntuación.
No podemos culpar a la tecnología, todo lo contrario, hasta los más elementales editores de texto en cualquier computador tiene correctores espontáneos. No obstante es increíble el modo en que se escribe y las huellas que la tolerancia va dejando en ello. Los más jóvenes se escudan en que para escribir en el Chat, no es necesario cuidar ese rasgo de elegancia.
Una voz escrita con B no es más alta, ni un sonido escrito con Z es más dulce, como tampoco a unos ojos a los que anteceda una H darán la impresión de tener espejuelos.
El dominio de la lengua sirve para hablar y escribir mejor. Un texto plagado de incorrecciones ortográficas desmerece al autor y deprime al lector. Es demasiado importante para un empleo o pasatiempo dominar la palabra escrita y que no sea la chapucería quién nos domine a nosotros. La verdad es que escribir con ortografía incorrecta es como salir a la calle como no nos gustaría que nos vieran, pero de igual forma deja muy claro lo que somos.

No hay comentarios: